Un agitador hace que un fluido que se encuentra dentro de un recipiente adquiera un movimiento circular. Este movimiento puede ser axial o radial, laminar o turbulento... según la función que se busque.
Los agitadores neumáticos están indicados para entornos con elementos químicos inflamables y/o volátiles ya que eliminan los problemas asociados a los modelos eléctricos.
Podemos acoplar distintos reductores para aumentar la potencia y adecuarnos a sus requerimientos de trabajo.